Existió una mujer que creyó haber encontrado el secreto de la juventud eterna, bañándose en la sangre de jóvenes vírgenes.
Fue la Condesa Erzsébet Bathory, que vivió en Transilvania durante una época signada por el poder absoluto de los señores feudales y la crueldad de la Santa Inquisición.
Y fue ella, una mujer de la nobleza, admirada y temida, la que superó todos los límites del horror, torturando y asesinando a más de seiscientas cincuenta jóvenes para apropiarse de su juventud y su belleza.
Esta es la historia real de Erzsébet Bathory, la Condesa Sangrienta.
BATHORY : RETRATO DE LA CRUELDAD